jueves, 19 de septiembre de 2019

La canción que a zelda aterra (III)

Los monstruos eran cientos,los trozos de carne de goron y la sangre que llovía de un momento a otro era atroz,una escena que deseaba que acabara pronto mientras corría para llegar a su objetivo. En la cima de  una de las paredes del barranco estaba una chica,zelda sabia que allí tenia que ir,sus pies estaban todos adoloridos,mientras corría se iba lastimando con las piedras que se iba topando por el piso,pero no importaba ese dolor,el miedo a que uno de los monstruos bajara y la matara era mayor,sabia que la habían visto, sabia que unos estaban bajando por ella y lo peor es que sabía que la perseguían pero aun había monstruos arriba esperándola,fuera lo que fuera lo que le pasará tenia que actuar rápido y evitar que la atraparan.
Algo paso a toda potencia cerca de su cabeza y la desestabilizó.
Una flecha se clavo en el piso y un liquido caliente comenzó a resbalarse por un lado de su cabeza,se le heló el cuerpo al pensar que su sangre estaba saliendo y que esa flecha casi la mata pero se levanto y siguió,siguió corriendo antes de que otra flecha tuviera oportunidad de darle.
Pudo ver a los monstruos. Criaturas de color carbón tan profundo e intenso como el mar de noche,con sus cuencas vacías y dientes afilados,podridos y rotos asomándose de sus bocas con la intención de desmembrarla y devorarla apenas la alcanzaran.

Mientas mas corría para evitarlos mas aparecían y mas cansada se quedaba,pero no iba a desfallecer.

Aun le quedaba un objetivo que cumplir y aunque le costara todo lo que le quedaba solo se repetía en su mente.

>tengo miedo pero lo haré,matare a cada uno de estos malditos monstruos!!!<
Mientras se confinaba a sus determinados y desesperados pensamientos las sombras se colgaban de las paredes y lanzaban afilados trozo de piedra a su camino.
La pobre princesa sintió un escalofrío al sentir la mirada fija de una de esas criaturas que lanzo un aullido,largo y potente y comenzaba a hacer pausas entre el,parecía la mezcla entre el deseo de sangre y el aullido de un lobo con el poder de los llamados de los monos,con esto por las paredes se asomaron desde atrás decenas de esas espantosas criaturas que contemplaban con sus ojos vacíos y deseosos de destrucción matar el cuerpo de la pequeña princesa.

Su objetivo solo era por un camino,no podía desviarse pero si quería sobrevivir tenia una sola oportunidad, debía buscar una cueva,un túnel otra grieta y esperar rezando a la diosa para que no la hallaran.

Se sentía el eco de la horda de monstruos tras de ella y sabia que sus segundos estaban contados si no actuaba y aceleraba el ritmo para encontrar donde esconderse.
Uno. Dos. Tres. Cuatro. Cinco.
Cinco segundos le tomo llegar al punto donde la pared se abría. Pero sintió como la sangre volvía a brotar de ella y cayo de cara al suelo del túnel en la pared, fue una piedra,los horrorosos monstruos le lanzaron piedra y una al fin le dio,pero no se la quito para no empezar a sangrar más de la cuenta y que siguieran su rastro,antes de eso se levanto tan rápido como pudo y cuando llego a la adentrarse un poco en la cueva vio un hoyo en la pared y decidió entrar en el para esconderse.
la cueva estaba muy oscura pero ella no sabia si esos monstruos podrían ver a través de la oscuridad,ya llegaron,no lestomo nada de tiempo y ella consiguió esta oportunidad de vida. Entonces vio cientos de sombras moviéndose a toda velocidad y sus pesadas pisadas resonaron por todos lados. Parecía que rompería todo en cualquier segundo, que la fuerza con la que pisaban hacia temblar la montaña y en cualquier segundo se derrumbaría el túnel.

Zelda se echo un poco mas para atrás por miedo,la piedra le molestaba y se la quería quitar.

A lo que retrocedió un poco... Sintió como la pared de atrás se rompía y se iba de espaldas,sintió como rodaba cuesta abajo.

"No... No... Como podre regresar... Diosa,dime que podre regresar!" pensó la niña... Lo susurro de nuevo y cuando lo iba a gritar para la tercera ocasiones se detuvo.

Su corazón estaba como loco,su respiración no tenia pausas y sintió como se heló su cuerpo una vez mas y luego se sintió totalmente débil.

Le dolía la cabeza y q lo que volvió a sentir la pierna un dolor terrible la recorrió,la piedra se había enterrado aun mas y sentía que a lo que intentara moverse le perforaba el hueso...

¿Sera que era si final?
No. Tal vez no podía ver nada y estaba herida pero ella iba a encontrar la forma de regresar y terminar todo.
Aun con la espalda al piso se llevo la mano al pecho,durante mucho estuvo practicando esto con su protectora.

Junto ambas manos y se concentro con todo lo que tenia intentando ignorar lo que podía del dolor que atenazaba su cuerpo.

Cuando separo las manos un pequeño fuego de coló rojo con tonalidades rosadas se libero.
Zelda sintió su calidez era alfo que duraría poco pero con esfuerzo haría otro. Ahora Mientras tenia luz vio a su alrededor y vio que las paredes de la cueva tenían rastros blancos...

"Según los libros que leí es cuarzo... Ah!".-se asusto de su propia voz,no había hablado desde que esto empezó y le salio instintivo cuando iba cayendo. Su voz resonó y le parecía anti natural, le pareció extraño pero... Se lleno de valor.-también hay piedras azules y sin duda son zafiros,no debo esta muy profundo ya que están se encuentran fácilmente en esta montaña... Debe a ver una salida cerca,solo espero que no termine dando vueltas en circulo."
Pasaron 5 minuto y solo había avanzando en mi nena recta,no hubo ningún cruzo o alguna curva,solo recto,sin subidas ni bajadas pero no parece llegar a ningún lado y la pierna le dolía de los mil horrores y ya de había caído 3 veces en ese poco tiempo y casi se desmayaba.
A exceptuando la pequeña llama entre sus manos,todo era oscuro y frío... En el fondo del su ser empezaba a preguntarse cuando fue la ultima sensación cálida que tuvo, ya que lo único que podía recordar era la obscuridad,el frío,el miedo,el terror, el pánico... Siempre lo mismo pasaba por su mente,las escenas de cadáveres y asesinatos en cualquier dirección,le dolía recordar que hace horas vio como todos morían asesinados en su ciudad,en la granja y en el pueblo... Le daba nauseas y se senia empalidecer cuando recordaba las escenas de las pobre mujeres siendo violadas a punto de morir y aun ya estando muertas... No pudo evitar recordar que la pobre malon... Fue violada y asesinada,zelda recordaba a su padre... Era un hombre simple y afable a la vida... Pero ya ni recordaba su nombre... Todo eso le dolía profundamente a la princesa que recorría el sendero oscuro de la cueva y entonces llego el recuerdo mas doloroso... Y esta vez no pudo evitar las lágrimas que comenzaron a brotar de sus ojos que ya estaban perdiendo la chispa de la vida... Su padre,su amado y padre y su héroe murieron sin siquiera tener una oportunidad de llegar a salvarlos... Su héroe fue devorado... Su padre no pudo soportar las heridas que ella misma causó... Que hacia zelda allí se preguntaba ¿por que una delicada princesa inútil que no ha echo mas que preocuparse y asustarse por todo tenia que ser la encargada de salvarlos...? ¿Por que estaba sola?

"..." solo podía volver a estar en silencio y recordar todo mientras lloraba... Mientras sangraba y mientras comenzaba a dejarse ganar ante la muerte poco a poco.

Luego se dio cuenta...

"Aquí... No hay monstruos... Aquí  No hay musica..." allí abajo no la siguieron los monstruos y no resonaba la musica que atormenta su mundo. ¿Por que?
El fuego que tenia en sus manos se deshizo por su falta de fuerzas y mientras zelda se sentía cada vez mas débil se llevo las manos al pecho,dentro del vestido estaba es roca. El cristal que le pidió a link.
La tomo y la vio desplandecer en el fondo. Una tenue luz roja... Ni sabia que era pero tomo su fe,rezo en su mente a la diosa hylia,y pasara lo que pasará le dio un beso a la pequeña roca de cristal. Como muestra de fe,como suplica al destino,como buscando fuerza o solo como una despedida... Y se ilumino.

Un instante después pudo ver una figura de luz roja esta vez en frente de ella... Mientras sus lágrimas de alegría y tristeza resonaba en todo el túnel.
La figura de su padre ilumino todo. Este acerco su mano suavemente a la cara de zelda y la acarició. Ella comenzó a sentir que sus fuerzas volvían a ella. Mientras la otra mano de luz se acercaba a su pierna,cuando la toco, zelda hizo un pequeño guñido de dolor, la piedra salio y su herida sano... Su fe,su amor y su determinación estaban juntos en esto. Era la señal de que tenia que terminar con todo esto y que su momento no había llegado.

La figura de su padre la veía fijamente y en su semblante se veía una triste expresión que aun así trasmitía la sensación de que decía

"Lo siento... Tengo mi fe en ti y se que lo lograras... Te amo hija"

Con tristeza y lágrimas en su rostro zelda dijo.

"Te amo padre... Juro que amhare que todo esto acabé, lo juro"
La figura comenzó a andar.
Seguía por el túnel en la misma dirección a la que zelda caminaba y después de unos minutos d silencio esta se detuvo y volteo a ver a la niña. Solo asintió y desapareció.
Justo en frente había un cruce.
Zelda sabia que ya estaba en la salida.
Unos pasos mas adelante el silencio se rompió,y zelda volvió a sentir esos horribles escalofríos. La musica volvio y a los lejos zelda veía el resplandor del la luz nocturna.

Ya estaba cerca de acabar con esto.



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